Furoshiki

No hay que decir que el modo de consumo de las personas ha cambiado en estos últimos tiempos, es más, desde que la Pandemia llegó a nuestras vidas y nuestras casa, las compras y las compras online ya no son las mismas. De hecho y por ello el nivel de desperdicios de cualquier artículo que compramos tiende a ser exponencialmente mayor, y eso es un problema acuciante para nuestra sociedad y para el planeta.

Es por todo esto que ya desde hace varios años, y como comentaba, con más fuerza en los últimos meses la conciencia de la sostenibilidad, la reutilización y también la conciencia ecológica, están formando las bases para los diseños de un futuro en el mundo del packaging, más sostenible y eco-responsable. Hoy en este post os queremos mostrar las nuevas oportunidades que le furoshiki ofrece bajo estos paradigmas.

Quizá no conozcas esta antigua forma de packaging, en países como Japón o Korea, están retomando esta antigua tradición llamada para los primeros Furoshiki y con pequeñas variaciones para los coreanos Bojagi.
Se trata de envolver los objetos a partir de pliegos de tela. Empresas como Lush o Shiseido ya lo han incorporado en sus diseños de pack y estrategias de marketing.

La técnica recibe el nombre del propio trozo de tejido, siempre cuadrado, llamado Furoshiki. Tradicionalmente su uso comenzó en los baños tradicionales japoneses (onsen) para guardar la ropa y distinguir cada atillo de cada usuario. Posteriormente se empleó para envolver, y transportar todo tipo de productos y como elemento indispensable a la hora de obsequiar objetos como modo de embalaje.

¿Cuál es la clave de esta técnica?

La clave más importante de esta metodología de packaging es que además de seguir las premisas que la sociedad de consumo está pidiendo en cuanto a reducción de desechos y sostenibilidad, se puede emplear durante un largo periodo de vida, pudiendo hacer que el mismo furoshiki funcione en diferentes situaciones y en todas pueda emplearse como un reclamo publicitario o de marketing, y lo que es más importante, como herramienta para fidelizar clientes y ampliar el universo de marca y la percepción de los valores de nuestra empresa se afiance y se comunique.

1 furoshiki 1000 usos

Los diferentes métodos de embalaje puede incluir desde bolsas de la compra, hasta envoltorios para botellas, bolsos para ocasiones especiales, o mochilas sin más limitación de espacio que el propio tamaño de la tela. Es la solución perfecta para que un solo soporte se adapte a cualquier tipo de producto, desde unos libros a un ramo de flores o una hogaza de pan.

El boxing y el unboxing. Un espectáculo para todos los públicos

No hay que olvidar que en los últimos tiempos, la experiencia es lo que hace a los productos se memorables, tanto que el simple hecho de sacar un teléfono de una caja es digno de hacer un video… ¿y si podemos hacer que esto se replique no solo cuando se abre sino también cuando se cierra?. Pues esto es lo que podemos hacer con el packaging de furoshiki, convertirlo en una experiencia global.

Supongamos que estamos en un comercio en el que hemos comprado por ejemplo una botella de vino, y en el momento la envuelven para que la puedan llevar o regalar envuelta en un furoshiki, hasta que finalmente, tanto para el que lo compra, como para el que lo recibe se convierte en una experiencia conjunta, diferente y global… que además podrán replicar y volver a emplear en otras ocasiones o usos.

Talleres de furoshiki en Bilbao. Furoshiki packaging

Desde nuestro estudio, y desde el afán de proporcionar nuevas soluciones de embalaje a nuestros clientes vamos a elaborar pequeños workshops donde poder poner en práctica y ver in situ esta técnica japonesa en acción, así nace Furoshiki packaging . Podrás ver el listado de talleres y matricularte en los mismos a través de nuestra web en Bilbao en esta página. Y si responde a tus necesidades de packaging y quieres valorar incluirlas en tu servicio o producto, no dudes en contactar con nuestro estudio.